Sepa que aquí tiene prenda mía,
por si precisa algún día
el hombro firme, casa en mi pecho,
Y la alegría de darte toda mi vida
Yo no tengo nada, te soy sincero...
pero te quiero, y pa’ acompañarte he de poner el hombro,
el canto, y la dicha de quererte tanto,
y darte toda mi vida.
Mejor así, mejor buscar la manera
de usar el tiempo que nos queda en la vida
en dar lo que uno pueda.
Cada uno a su modo, codo a codo...
Y darte toda la vida...
Juan Quintero
No hay comentarios:
Publicar un comentario