lunes, 4 de mayo de 2009

Y a pela´ se



Aprendí hace un tiempo que el amor se cosecha como la caña: macheteando el zurco con 39 grados a la sombra. Nada es fácil mis queridos.
Sin embargo, tanto los trabajadores de la caña como los del amor, cada año preparamos el terreno, caminamos el cañaveral viéndolo crecer y esperamos el tiempo de zafra para proveernos de alimento.
Además, todos creemos que la cosecha que comienza va a ser mejor que la pasada y apostamos con convicción, olvidandonos de que las vaquitas son ajenas, aunque no las penas.
Entonces la Echeverri canta Quedate conmigo y el deseo, latente, de que suceda y sin reparos.

En unos pocos meses comenzarán a circular los carros zafreros por la ruta 38.

1 comentario:

emilce dijo...

hola viki!el q siembra cosecha dicen...pero bue creo q todo es relativo,hay q ver en dond se siembra... x ej en terrenos propicios o en tierras secas... en sintesis en temas del cuore creo q somos como los agricultores q son "inversionistas" ya q el riesgo d una buena cosecha o no es gde, pero viste el q no arriesga no gana y hasta d las peores cosechas se aprende algo,besitos!!!tqm