jueves, 19 de marzo de 2009

¿Hasta el último chelín?

Escuché hoy a un activista político decir que si uno no corre riesgos por el cambio social ¿porque lo haría entonces?
Pienso que asumir correr un riesgo es cosa seria, que hay que estar dispuesto y sobre todo hay que desear mucho aquello por lo que uno expone el cuero. Claro que el cambio social es un buen motivo, y también lo son las revoluciones y los crecimientos internos de cada uno y los amigos y la familia y, last but not least, los amores.
El asunto está en la convicción, no de que todo resulte, sino de que no se puede hacer otra cosa más que arriesgarse aunque el fracaso nos cueste perderlo todo. Pero nada es tan simple como parece y los héroes al estilo Ulises murieron con la antiguedad grecolatina.
Además frente al precipicio de las decisiones siempre está uno -solo- y la incertidumbre, hecho un manojo de adrenalina hirviendo.

2 comentarios:

ioqui dijo...

Ando llena de incertidumbres...sin embargo me arrojo a cada rato. no llevo mucho en los bolsillos...

Anónimo dijo...

ay vik cómo se extraña hoy su amistad por los pagos internos de la nena... ex nena o como quieran llamarla... he llorado por la incertidumbre y he llorado mucho por los riesgos que se corren y me he llenado de miedos y de monstruos... y si vik uno está SOLO cuando toma decisiones... y de verdad la adrenalina hierve